GRACIAS A DOS BURROS, LAS CEBRAS GANARON LA GUERRA

21/10/09

A principios de este año una incursión militar israelí en territorio palestino acabó con varios animales del zoológico de la Franja de Gaza. Algunos de los bichos fueron víctimas de las armas de fuego. Otros, afectados por el éxodo de la población, murieron de hambre.

Las cebras del zoo, que eran una de las atracciones preferidas de los niños, no pudieron contar el cuento, y terminaron muertas junto al camello, algunos monos y unos cuantos zorros.

Empecinados en que el zoológico continuase funcionando, los palestinos hicieron un rejunte con los animales sobrevivientes, los curaron y reconstruyeron el predio (el emprendimiento había comenzado a fines de 2005, gracias al apoyo de varias ONG. Además de los animales contaba con una biblioteca infantil, un parque y un centro cultural).

Pese al esfuerzo de los grandes, los chicos seguían extrañando a las cebras… así que las autoridades del zoo pusieron en marcha un operativo de resucitación, a través del camuflaje creativo: agarraron dos burros hembras, les cortaron el exceso de pelo y, con ayuda de cinta adhesiva y tintura para cabello, pintaron varias rayas en sus lomos para disfrazarlos de cebras.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

A este empresario sí que no se le puede decir que es un "burro"... Un fenómeno y muy ingenioso el muchacho. Además es bien clarito y terminante: Nada de grises, blanco y negro: Cebra!!

Blanco y negro: ésa es la clave en código cebra. El gris también tiene sus encantos, pero al no ser blanco ni negro, nos remite más a la vacilación y la duda. Sin ir más lejos, si blanco y negro son colores de cebra, el gris es cosa de dubitativos y burros... Y acá entra en juego el ex futbolista Jorge Valdano, quien, en un rapto de inspiración, sostuvo: "la duda es un mal lugar para quedarse mucho tiempo". Mientras los burros dudaban, apareció el dueño del zoológico y los pintó de blanco y negro: ¡Ahora andá a cantarle a Gardel! El mundo a veces es muy jorobado, y no sólo para los camellos.