UN CONSUELO PARA SIESTAS SOLITARIAS

25/9/12

Producto de la inspiración y el sueño de dos inventores, el japonés Key Portilla-Kawamura y el iraní Ali Ganjavian, ya se encuentra a la venta una almohada todo terreno, que permite a sus potenciales usuarios esconder la cabeza y encarar una siesta en cualquier momento y lugar.

El utensilio, que fue bautizado como “almohada de avestruz” (Ostrich Pillow, en inglés), es una especie de casco mullido -con aberturas donde se pueden colocar las manos- que posibilita dormitar lejos de la cama, ya sea en una sala de espera, escritorio de oficina, butaca de cine, asiento de ómnibus y todo sitio donde haya chance de reposar la cabeza.

Como dicen sus creadores, “las personas pasan cada vez más tiempo en el trabajo y ante esa realidad es necesario tener un espacio para refrescarse con una siesta íntima y reparadora”. Eso sí, antes de meter la cabeza en el solitario descanso, hay que desembolsar los U$S 60 que cuesta la almohada.

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