El muchacho de la foto es un alumno de la Universidad Federal de São Carlos, Brasil, que aprovechó una protesta estudiantil realizada en el restaurante de esa unidad académica para armarse un sauna en las ollas a vapor de la cocina. El rectorado de la universidad está tratando de individualizar al alumno para sancionarlo pero, hasta el momento, el pixelado del rostro le viene complicando la tarea.
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